AGRICULTURA
Damm impulsa un proyecto en Bell-lloc d'Urgell para reforzar la resiliencia de la cebada al cambio climático
En Bell-lloc d’Urgell, junto a Semillas Batlle y Cupasa y coordinado por Agrotecnio. El objetivo del programa es evitar pérdidas de rendimiento en los campos y garantizar la calidad del cereal

Un momento de la jornada celebrada ayer con la visita a campos. - JOAN GÓMEZ
Bell-lloc d’Urgell acogió ayer una jornada técnica para presentar el proyecto ResOrMa (Resiliència de l’Ordi i de la Malta) una iniciativa que busca salvaguardar la producción de cebada cervecera frente a los efectos del cambio climático. El acto, celebrado en los campos experimentales de este municipio, reunió a representantes del sector agrícola, investigadores, docentes, estudiantes y empresas vinculadas a la cadena de producción de la cebada y la malta. El proyecto está liderado por Maltería La Moravia de Bell-lloc (Grupo Damm), Semillas Batlle y Cupasa, y coordinado científicamente por el grupo de investigación en Fisiología de Cultivos de Agrotecnio. Se trata de un grupo operativo cofinanciado por el ministerio de Agricultura, la Generalitat y fondos europeos. Según explicó la responsable de producción de Maltería La Moravia, Neus Prieto, “el proyecto nace de la necesidad de contar con variedades de cebada más resilientes a condiciones climáticas cada vez más extremas, como los golpes de calor o las lluvias justo antes de la cosecha, que pueden arruinar la calidad del grano y dificultar la producción de malta de calidad”.
La iniciativa se enmarca en un esfuerzo conjunto para entender y mejorar la capacidad de resistencia de distintas variedades de cebada ante estos eventos. “Nuestro objetivo es evitar pérdidas de rendimiento y asegurar la calidad del producto final, no solo para mantener la producción local, sino también para reducir la dependencia de importaciones”, añadió Prieto.
Durante la jornada, los asistentes pudieron conocer de primera mano las parcelas experimentales donde se están haciendo ensayos con diferentes variedades, como Fantex, Belcanto, Planet, Leandra, Rubiana y Rubiales, así como una línea avanzada de Semillas Batlle. Parte de estos ensayos incluyen simulaciones de golpes de calor realizados mediante invernaderos instalados en pleno campo.
Gustavo Slafer, investigador de ICREA en la Universidad de Lleida y Agrotecnio, detalló que “el proyecto estudia tanto la tolerancia al calor extremo como la sensibilidad al brotado precosecha, cuando las semillas germinan antes de ser recolectadas, lo que puede inutilizar el grano para uso maltero”.
Roxana Sabín, catedrática de la Universitat de Lleida, destacó que “el valor de ResOrMa radica en que cubre toda la cadena de producción: desde la genética de la semilla, el manejo agronómico y la cosecha, hasta la transformación en malta y cerveza”.
El proyecto responde a la creciente vulnerabilidad del cultivo de cebada en el noreste peninsular, especialmente en zonas productoras en Lleida (Bell-lloc, Gimenells, Almacelles) o Aragón (Huesca, Sariñena), de donde proviene buena parte de la cebada destinada a Maltería La Moravia. “La cebada siempre ha sido un cereal resistente, pero los datos muestran que esta resistencia está disminuyendo ante las nuevas condiciones climáticas. Por eso queremos entender si el problema está en la pérdida de vigor genético o en los efectos extremos del clima actual”, concluyó Prieto.