RELIGIÓN
El obispo electo de Lleida, Daniel Palau: “Vengo aquí con ganas de aprender”
Ee reunió este jueves con Salvador Giménez, ahora apostólico de la diócesis. Asegura que el nombramiento es un “reto” que reconoce su trayectoria

El obispo electo, Daniel Palau, ayer junto al ahora apostólico, Salvador Giménez. - PAU PASCUAL PRAT
“Vengo aquí para aprender, tengo muchas ganas de conocer esta nueva realidad”, aseguró ayer el futuro obispo de Lleida, Daniel Palau Valero, durante su presentación en la capital del Segrià ante los medios de comunicación. Palau llegó a la ciudad tras despedirse el miércoles de la diócesis de Sant Feliu de Llobregat –donde ha ejercido como sacerdote los últimos 22 años–, para reunirse con el que será su predecesor, Salvador Giménez. Por su parte, Giménez pasó a ser el apostólico de la sede vacante de Lleida.
El obispo electo señaló que su hasta ahora desconocimiento sobre el territorio “no creo que sea algo negativo, sino un aspecto muy realista y sincero”, afirmó. Asimismo, agradeció a Giménez su acompañamiento “como un maestro”, dijo, y se definió “como un niño con zapatos nuevos”.
Palau recibió la petición de la Nunciatura de aceptar el cargo, encomendado por el papa León XIV, “con sorpresa e incluso con un poco de miedo, porque supone todo un reto para mí”, itió, y añadió: “Lo tomé, de alguna manera, como un reconocimiento a mi trayectoria”. Sin embargo, no quiso especificar cuándo recibió la llamada: “Fue hace un tiempo... Hasta aquí puedo decir. Me aron por teléfono mientras estaba almorzando”, recordó.
Preguntado por la propuesta de Junts en el Parlament de Catalunya de prohibir símbolos religiosos como el velo en las escuelas, Palau defendió que “en general, todos los símbolos religiosos deben poder llevarse y ser expresados con normalidad, siempre que sea desde la fe y la paz y con el deseo de integrarse en la sociedad”. En relación con la falta de vocaciones sacerdotales, afirmó no tener “una varita mágica”, pero sí “el entusiasmo y la certeza de que todos buscamos nuestro lugar en este mundo. Encontraremos respuestas creativas para que los jóvenes puedan responder con generosidad a lo que Dios nos pide”, señaló.
Paralelamente, respecto a los litigios abiertos por las obras de arte de Sijena, reconoció que, de momento, “no tengo criterio sobre el tema”. Por su parte, el obispo saliente aclaró que “es una cuestión que se ha alargado mucho en el tiempo y, por lo tanto, es muy complicado de entender para una persona que no lo ha vivido”, añadiendo que “hemos recurrido la sentencia al Supremo y nuestro recurso ha sido itido”.
Hasta el 19 de julio, día de su evangelización y toma de posesión ofical como obispo de Lleida, Palau no podrá hacerse cargo en la diócesis. El acto tendrá lugar en la Catedral a las 11.00 horas.